Shakespeare decía: Yo siempre me siento feliz, ¿Sabes por qué? Porque no espero nada de nadie; Esperar siempre duele; La vida es corta, por eso ama la vida, y sé feliz y siempre sonríe, sólo vive para ti y recuerda; Antes de hablar, escucha; Antes de escribir, piensa; Antes de herir, siente; Antes de odiar, ama; Antes de rendirte, intenta; Antes de morir, VIVE.

No sé dónde voy, solo se que tengo que llegar.

Quiero estar contigo sin tener que nombrar la distancia. 

Hay días tontos... Y tontos, todos los días.

No mires atrás ningún día.

Señoras, señores, estoy harta de vivir entre tanta mentira. No se como, pero es así, y me cansé. Quiero empezar de nuevo, todo lo que tenía, lo perdí, y lo que he creído tener, no lo he tenido, es decir; la suerte no está de mi lado. Me cansa ser la típica de; Hola, estoy bien, ¿y tú?, no, ya basta. Ahora mismo no me siento bien, por un lado se que me pasa, por otro, no. Por un lado recuerdo a una persona que me ha mentido y me ha echo daño cuando ya no tenía nada que ver conmigo, y por otro lado, echo de menos a una persona, que me ha dado todo su cariño, y yo lo he desperdiciado. Joder, como desearía que todo fuera un sueño, y que cuando despertase, nada estuviera pasando. Desearía salir más, y dejar de lado estos pensamientos. Claro, ahora escribo todo lo que me viene a la cabeza, pero nunca podría expresar todos mis sentimientos. Está claro. Cuando desease llorar, solo una persona o dos estarían ahí, reír, lo mismo. En cambio, esta gente que se hace llamar amiga, esta gente que la ves y te sonríe, yo, sinceramente, os pregunto, ¿quiénes sois?, y ya, vamos a dejarnos de bromas. Aquí o se es amigo, o no se es nada. Supongo que no mucha gente entenderá esto, creo que si yo lo leyese, tampoco lo entendería, total, son sentimientos pasajeros, ahora vienen, luego se van, y si vuelven, no creo que les de tanta importancia. Odio tener que callarme que estoy mal, por el simple echo de que cuando cuente que tengo, no quiero llorar. Pasar tres días fuera de casa, me da a conocer mundo, gente que no conozco. Me doy cuenta de a quien le importo de verdad, y quien me tiene para lo que le incumbe. De verdad lo digo, para tener personas así, prefiero no tener a nadie. Ya me cansé de este juego de niños, ahora hay que sonreír, aún que cuesta, aún que la vida te juegue sus malas pasadas, aún que no tengas lo que deseas... Siempre tendrás a una amiga, que te quiera, no por como eres por fuera, si no por dentro. Y, a lo mejor, tendrás a esa persona, que te quiera de verdad, y te haga ver, que aún que el cielo no sea azul, ni la vida de color de rosa, tu le puedes dar una patada, y dejar ver al mundo, una gran sonrisa. Y, debes saber, que te quiero a ti, pero no estás, y, en fin, no tengo más ganas de escribir... Sinceramente, desearía tenerte de nuevo aquí. Conmigo.

Soy la chica que siempre pierde, aquella que finge su sonrisa, la chica que aparenta ser fuerte pero que todos los días continua rompiéndose por dentro, la chica que esta ahí sonriente y parece no tener problemas, aquella que contiene las lagrimas hasta que has colgado el teléfono, cuando digo: "tranquilo, estoy bien", realmente estoy esperando a alguien que de verdad le importe y diga: "no, no lo estas"

Dentro de la bola de nieve del escritorio de mi abuelo había un pingüino con una bufanda a rayas rojas y blancas. Cuando yo era pequeña, mi abuelo me sentaba sobre sus rodillas y cogía la bola de nieve. La ponía al revés, dejaba que la nieve se amontonara en la parte superior y le daba rápidamente la vuelta. Los dos contemplábamos cómo caía la nieve poco a poco al rededor del pingüino. El pingüino estaba solo allí dentro, pensaba yo, y eso me preocupaba. Cuando se lo comenté a mi abuelo, dijo: "No te preocupes, Patry; tiene una vida agradable. Está atrapado en un mundo perfecto"

Gracias a ti, mi cielo vuelve a ser azul.

Las personas aman, sienten. Las personas entregan su corazón, las personas reciben corazones y los cuidan, los miman, los destrozan, los devuelven, los tiran. Las personas sufren, son decepcionadas, lloran, gritan. Las personas sienten dolor y piensan en la muerte, sienten celos y se pierden en sí mismas. Las personas avanzan, retroceden, cometen errores y aciertan. Las personas olvidan, las personas recuerdan. Las personas se alegran de recordar, lloran por recordar. Las personas se sinceran y les hacen daño, las personas se protegen tras escudos y no dejan entrar a nadie. Las personas se arrepienten, las personas se asoman al pasado y caen al vacío. Las personas perdonan. A veces es tarde. A veces es el momento indicado. Las personas aprenden, las personas piensan en el futuro y corrigen sus pasos, aprenden de sus aciertos, los disfrutan. Las personas aprenden de sus errores, los enmiendan, los evitan. Las personas dicen "te amo" a otra persona. Luego a otra. Luego a otra. Luego a otra. Luego a otra. Las personas no mienten, las personas sólo sienten. Siempre sienten. Las personas son vulnerables al tiempo, pero los sentimientos son eternos. Por eso las personas se enamoran una vez, y otra. Y otra. O solo una. Cada persona es un mundo. Cada corazón una galaxia y cada amor una historia que se guarda dentro, que se escribe en una sonrisa. Que dura para siempre o se pierde entre un millón de estrellas. Pero siempre aparece otra. Porque personas, hay millones. Y todas las personas sienten. Todas sufren. Todas caen. Pero todas se levantan.

Se podría decir que más de una vez me he preguntado si piensa en mí antes de acostarse. Si recuerda todas y cada una de las cosas que he dicho o hecho. Si habrá leído una y otra vez mis mensajes. Si se acuerda de mí porque sí. Si me echa de menos cuando no me ves o si tiene ganas de verme. Si algún día se habrá quedado mirando cómo me voy. Si de verdad siente celos. Si de verdad me conoce bien. Si de verdad siente lo que debe de sentir. Me quiere, no me quiere, me quiere...

Soy la clase de persona que no se rinde fácilmente pero que a la mínima se le echa el mundo encima, ese tipo de chica que no piensa lo que dice, de las que se arrepiente al tiempo que habla, soy alguien fácil de convencer y difícil de hacer entrar en razón. Suelo ser la que se sabe poner sin problemas en el lugar del otro, ese tipo de persona que sin querer, sonríe para parecer mucho más fuerte.

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Cuando crees que lo tienes todo perdido, aparece esa persona, la única persona capaz de hacerte olvidar del resto del mundo para solo pensar en ella. Es la persona que te ha cambiado el sistema, el metabolismo de tu día a día; acaba de romper tus esquemas... Pero, ¿sabes? Ya nada importa, lo único importante ahora es no perderla.

En este mismo instante hay alguien se despierta y alguien cierra sus ojos para dormir.. o para soñar.

Las caídas, los golpes, las heridas, solo tendran sentido si te levantas para volver a intentarlo..

Welcome to the world without worries..